¿Qué hacer para retrasar el envejecimiento

LAS VENTAJAS DE ESCRIBIR A MANO

 

 En los tiempos donde la tecnología está facilitando nuestro trabajo y mejorando nuestra vida, están quedando rezagadas nuestras propias capacidades para crear, y desarrollar arte propio. Se están perdiendo métodos antiguos que nos ayudaban a comunicarnos y qué a la vez facilitaban la creatividad.

 

Escribir es una actividad compleja

Al escribir a mano se activan más áreas del cerebro que al hablar o teclear frente a la computadora. La escritura manuscrita activa tres procesos cerebrales fundamentales: el área visual, habilidades motoras y capacidades cognitivas como la lógica y la memoria.

   El área motora es la parte del cerebro que dirige al cuerpo para llevar a cabo todos los movimientos necesarios para poder escribir. Esto significa que se tiene que pensar antes de escribir y después mandar los mensajes del cerebro a la mano para poder llevar a cabo el proceso mecánico de escribir.

   La visión es importante, porque no solo el cerebro manda la señal de escribir; sino también tiene que recurrir a la vista para dar señales al cerebro para aprobar lo ya hecho.

   Las áreas lógicas comprenden el mensaje que por medio de conceptos abstractos queremos trasmitir, y tratan que las frases pasen lo más exactas posible al papel.

   También la memoria tiene su actividad, con la escritura a mano es más fácil recordar el mensaje en sí y los conceptos confusos que lo originaron.

 

¿Qué es mejor, escribir de forma manual o hacerlo a la tecla?

   Cada letra que trazamos es diferente a las demás, tiene su propia estructura y una dinámica de ritmo que la destaca de las otras. Por lo tanto, nuestro cerebro asocia a cada letra una idea diferente y, al establecer ligados o uniones entre letras, trabajamos la asociación de ideas y de pensamientos; fomentamos la habilidad lógica, la continuidad y el razonamiento vinculado y estratégico.

 

¿Comparamos este ejercicio con el que hace nuestro cerebro cuando escribimos en el teclado?

   En la escritura mecanografiada, todas las letras son iguales, todas tienen forma de tecla y su dinámica es exactamente la misma: un golpecito con la punta del dedo. El único trabajo del cerebro aquí es identificar en que tecla se ubica la letra que queremos escribir. No existe vínculo entre una letra y otra. No hay, por tanto, continuidad, ni asociación de ideas, sino ideas independientes separadas por un golpecito de tecla.

 

Cuando el cerebro hace gimnasia

   El volumen de activación cerebral es, en consecuencia, mayor en la escritura a mano y también son mayores las conexiones que se establecen entre los dos hemisferios. Las redes neuronales que tejemos con la redacción manual son mucho más complejas que las que realizamos con el teclado.

   La escritura manuscrita genera imágenes mentales diferentes por cada letra y provoca impulsos en nuestro cerebro al conectar unas áreas con otras y activar las conexiones neuronales.

 

Favorece la asociación de ideas y el razonamiento lógico

   La unión de unas letras con otras provoca en la que el cerebro no solo se debe concentrar en el presente, también tiene que recordar el pasado, lo que ya escribió y en el futuro en las letras que siguen. La unión de palabras son el resultado de ideas y pensamientos que, de forma constante, trabajan la comprensión, la abstracción y la lógica. Cuando escribimos a mano, nuestro cerebro se encuentra tomando decisiones, buscando soluciones.

   Esto agiliza el cerebro cuando tratamos de escribir. Nos ayuda a ser más astutos, a pensar más deprisa, a entender las cosas y situaciones con mayor agilidad, favorece la capacidad de improvisación y, como veremos más adelante, alimenta la creatividad.

   La escritura cursiva ligada es, en definitiva, desarrolla la inteligencia y la agilidad mental. Además, mejora la capacidad de concentración de las personas.


Comentarios